El día 26 de
Noviembre, varios componentes del club de lectura Mardeleva, asistimos en Jerez
a la presentación del nuevo libro de Antonio Muñoz Molina “La noche de los
tiempos”. Como recientemente habíamos leído “Plenilunio” de este mismo autor,
aprovechamos para llevar el libro y que nos lo firmara.
La
presentación corrió a cargo de Lalia González-Santiago, directora de LA VOZ de
Cádiz.
Antonio
Muñoz Molina empezó hablando de su libro La noche de los tiempos, que desarrolla el drama del exilio español
tras el comienzo de la Guerra Civil. La historia se inicia a finales de octubre
de 1936 cuando su protagonista, el arquitecto Ignacio Abel, llega a la estación
de Pennsylvania, última parada de un largo viaje desde que escapó de España,
vía Francia, y en el que dejó atrás a su familia -esposa e hijos- incomunicada
tras uno de los múltiples frentes de un país ya quebrado por la guerra. A lo
largo del viaje recuerda la historia de amor clandestino con la mujer de su
vida y la crispación social y el desconcierto previo que precedieron al
estallido del conflicto.
Escribir
este libro le ha llevado más de tres años. Ha visitado bibliotecas, hemerotecas
y archivos exhaustivamente. Un libro de más de mil páginas, que le ha servido
para conocer mejor la vida española de una época y la fragilidad de las cosas
que se dan por supuestas y lo fácil que es perderlas. Que se puede hacer o
decir lo que queremos y que no pasa nada, hasta que un día se interrumpe la cotidianeidad,
y entonces si que pasa. Un día uno sale de su casa y no puede volver más a
ella.
No trata el
libro sólo de la Guerra Civil, sino de una historia de amor apasionada en la
que aparecen escritores exiliados de la generación del 27 como Juan Ramón
Jiménez, su mujer Zenobia Campubrí, Salinas, Alberti, y alguno de ellos no
salen bien parados en la novela. Hay una clara referencia a la crisis europea
de los años 30.
Comentó que
la Guerra Civil española no se entendería si no es en conexión con la crisis de
las democracias y de todo el sistema que provocó la I Guerra Mundial y la
crisis de 1929. Por lo tanto intentar establecer un sistema democrático como
fue la II República española, en medio de una crisis internacional y en un país
aislado, pobre y lleno de desigualdades sociales, fue bastante difícil y
complicado como sucedió.
Aunque fue
muy moderado y conciliador en cuanto a los dos frentes de la Guerra Civil, no
dudó en declarar culpable a Franco y sus seguidores porque fueron los que se levantaron contra un
gobierno al que habían jurado defender.
La anécdota
de la jornada vino en el turno de preguntas, cuando un asistente se levantó
para decir que él estaba convencido de que Franco había tenido razón
para sublevarse ante el régimen corrupto que mantenía la II República.
Lógicamente y muy calmado, le volvió a decir que quien se levanta contra un
régimen elegido por el pueblo, el culpable es él.
Finalizó el acto con muchos aplausos
y después pasó a firmar los libros.
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